Cuenca es una pequeña
localidad que se encuentra situada en la zona de los Andes centrales,
concretamente en la falda del cerro Huamanrazo y cuenta con un gran número de
pequeños manantiales.
Es uno de los diecinueve distritos de este
Departamento.
Inicialmente se
llamaba Guanaco, como el camélico que vive de forma silvestre en Sudamérica.
Su
nombre fue cambiado al de Cuenca, en honor a la ciudad de Cuenca en España ya
que su gobernador, Don Amador de Cabrera, era natural de allí.
Una de sus fiestas
más interesante la celebran en Semana
Santa que es de Interés Turístico Internacional, La Semana de Música Religiosa.
Un encuentro de música sacra que reúne a muchos visitantes.
Fue un importante
centro minero en la época colonial. La mina de mercurio o la de la muerte,
recibió el nombre de la Patrona de los mineros, Santa Bárbara.
Fue un regalo
del Cacique Navincopa a Don Amador de Cabrera, gobernador de la ciudad y muy
devoto de Ntra. Sra. De la Concepción. Explotada durante el virreinato y
considerara como “La Alhaja de la corona española.
Sabemos que Perú es
la mayor reserva mineral de la tierra y tiene las minas más opulentas del mundo
de oro y plata.
Esta localidad, al
tener un gran número de pequeños manantiales, vive de la agricultura, sobretodo
de cereales y patatas, de las que cultivan 8 especies nativas y unas 2.300
variedades.
La industria ganadera también tiene importancia con la que comercian
sus productos lácteos, artesanía en pieles y buenas carnes.
Cuenca es un lugar
familiar, te sientes como en casa por la amabilidad de sus habitantes y su gran
hospitalidad.
La patrona de Cuenca
es la Virgen de la Candelaria y el mes de febrero y es la mayor fiesta
celebrada. La música, la cultura y la danza se fusionan recorriendo la ciudad y
es un buen momento para exponer puestos callejeros con dulces, comida típica
hecha con cereales y mostrar la artesanía. Sus habitantes visten sus ropas
tradicionales de Perú. Llenas de color.
La iglesia de Cuenca
fue construida por los Franciscanos en honor
a Nuestra Señora de la Concepción.
De estilo neo-clásico es muy antigua.
Su campanario tiene arcos de medio punto y su cúpula de media naranja. La
fachada principal tiene la representación en relieve del rostro de Bóreas, el
dios griego de los vientos del norte.
Sus habitantes están
apostando para nombrarla Patrimonio de la Humanidad de Perú por la gran
historia que encierra en su interior donde guardan imágenes de la época
colonial. Data del siglo XVII.
Uno de los grandes
atractivos de Cuenca son las aguas termales de Aguas Calientes.
Rodeado por un exuberante
paisaje este bello lugar, es muy atractivo por su clima templado y donde se mezclan
pozas de aguas termales y corrientes de agua.
Un buen lugar donde
poder relajarte y al que acuden multitud de visitantes. Por esta zona puedes
ver grutas naturales con rocas talladas por la erosión de las aguas sulfurosas
que emanan del subsuelo.
Desde aquí también
puedes divisar la cuenca del río Mantaro en toda su extensión. Este río
pertenece a la cuenca del río Amazonas.
En la época de
Navidad se engalanan con sus mejores trajes y festejan el nacimiento del Niño
Jesús con música, bailes y sus mejores viandas.
El baile por
excelencia de la Navidad y de esta parte de la sierra de los Andes es el Baile
de los Machos, conocido como el Huaylas.
Un tipo de baile y
música andino de origen precolombino en el que la danza representa el vistoso
galanteo del macho a la hembra.
Los movimientos del
baile es una alegoría a la siembra, cultivo y cosecha de la patata. Los
vestidos son los típicos de campo y van descalzos. Es un baile lleno de vigor y
alegría.
Bailan y hacen
saltos de acrobacia mientras llevan unas tijeras en las manos.
Cuenca, al situarse
en la zona de los Andes, es un lugar idóneo para hacer excursiones y deportes
al aire libre.
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